Hace cinco años, fui testigo, nació una pasión que hoy se ha convertido en un proyecto lleno de sueños, esfuerzo y dedicación: la Rondalla “Nuestras Voces, Son Nuestros Recuerdos”. Desde sus inicios, esta agrupación musical ha vivido un proceso de crecimiento personal y colectivo, en el que la música ha sido el vehículo para transformar melodías en emociones y escenarios en verdaderos hogares.
A lo largo de estos cinco años, cada ensayo y cada presentación indican las mujeres de este colectivo musical que son la mayoría, han contribuido a consolidar un camino lleno de aprendizajes y experiencias enriquecedoras. La pasión artística compartida por sus integrantes ha fortalecido su espíritu de unión y compromiso, permitiéndoles no solo interpretar música, sino también brindar terapia musical como su principal objetivo: ofrecer vida, esperanza y alegría a través de cada nota.
Este aniversario es un reconocimiento al compañerismo y la felicidad que cada uno de nuestros queridos adultos mayores como una terapia musical con esfuerzo, talento y corazón de quienes han hecho posible este hermoso proyecto. La Rondalla “Nuestras Voces, Son Nuestros Recuerdos” continúa creciendo, inspirando a su comunidad y dejando huellas imborrables en cada corazón que escucha la música de nuestros queridos adultos mayores.
Gracias la invitación y permítanme felicitar por este aniversario y desear muchos años más de cumplimiento de metas, objetivos y terapia musical. Adelante y a seguir para celebrar juntos el paso del tiempo y la fuerza de un proyecto que sigue vibrando con pasión y dedicación en Otavalo, Imbabura, Ecuador y el mundo.
Toda la ciudadania está invitada a la conmemoración de estos cinco años de historia, el próximo 18 de julio a las 18H en el auditorio LIA de La Fábrica Imbabura en Atuntaqui.
